Frente al aumento de importaciones lácteas Colombia debería activar de manera urgente el plan exportador de lácteos diseñado por el Departamento Nacional de Planeación en 2022
LECHE
"José Félix Lafaurie, presidente de Fedegán, le envió una carta a la ministra de Agricultura, Jhenifer Mojica, sobre la difícil situación del sector lechero en el país,"

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Un llamado de alerta para mitigar la constante caída de los precios de los productos lácteos en el país y contrarrestar el inminente incremento de sus importaciones, realizó Óscar Cubillos, director de la Oficina de Estudios Económicos de Fedegán-FNG en su habitual columna de opinión titulada “Importación inevitable, exportación un plan” y publicada en el portal Contexto Ganadero.

Señaló que debido a estos dos factores y, también, a la frecuente caída de los precios internacionales de la leche en polvo y el dólar barato en Colombia, se debería activar de manera urgente el plan exportador de lácteos diseñado por el Departamento Nacional de Planeación en 2022, para mitigar una inundación de importaciones de estos productos alimenticios en el país.

Recomienda que la estrategia inmediata debería ser que Colombia aumente los destinos de exportación lechera y, asimismo, incremente el consumo interno de los productos lácteos.

Importaciones se podrían acentuar

“Serán las dos únicas opciones para afrontar la baja de precios por cuenta del aumento de las importaciones que, sea el momento de decirlo, se acentuarán aún más desde enero 1 de 2026, fecha en la que llegan a su fin los contingentes de leche en polvo desde EE. UU.”, expuso.

Advierte que a partir de ese día el arancel de importación será de cero, “Es decir, que ingresará a Colombia leche en polvo infinita con arancel cero”, agregó.

Para el economista, “es importante tener en cuenta que a diferencia de la exportación de carne que contempla destinos de larga distancia, en leche, las consideraciones deben ser del vecindario, fundamentalmente Latinoamérica y el Caribe”.

Seis factores manifiestos

Cubillos se refiere en su columna a seis factores debidamente manifiestos que son los siguientes:

1. Precio internacional a la baja: el precio de la leche en polvo, tanto entera como descremada, desde mediados de 2022 muestra una tendencia a la baja bastante fuerte, tanto en los mercados de Oceanía, Europa y Estados Unidos. Esta situación no se registraba desde 2013 cuando de manera similar se dio una caída en sus precios hasta mediados de 2015, año desde el cual se ajustó y presentó cotizaciones de mucha estabilidad hasta 2021.

2. Mayor caída de precios a nivel mundial: mejores niveles en la oferta mundial de materias primas como granos y fertilizantes, así como tipos de cambio más estables, han contribuido para que la producción de leche se haya incrementado haciendo que su cotización disminuya. Seguramente falta aún una parte importante de ese ajuste a la baja, pues los precios de dichos insumos todavía pueden caer más hasta recuperar la tendencia de mediano plazo, es decir la de antes de pandemia.

3. Escenario propicio para importar: esta situación de los precios internacionales de la leche en polvo, sumado al comportamiento doméstico de la tasa de cambio que desde hace unas semanas registra mayor apreciación del peso, es decir un dólar más barato, efectivamente contribuirán para que exista mayor propensión a importar.

4. Recuperación de la oferta lechera: la industria lechera desde finales de 2021 registró en el mercado local menores niveles de producción lo que hizo que los precios se elevarán de manera importante. Solo hasta el segundo trimestre del año la oferta lechera ha empezado su recuperación haciendo que los precios empiecen a disminuir.

5. Mayor importación, menor precio: los menores precios internacionales y el menor precio del dólar permitirán que ingrese más leche en polvo importada en el segundo semestre del año acelerando la baja en los precios.

6. Fenómeno de El Niño: el único factor mitigador sobre una eventual caída en los precios del litro de leche sería la entrada en pleno del fenómeno de El Niño, que por ahora se muestra de muy poca intensidad en las zonas lecheras.

Posicionar nuevos destinos

El columnista destacó el esfuerzo exportador de la industria lechera y expone que, “si bien no marca las cifras logradas en 2008 y 2009 con destino a Venezuela, sí marca su estrategia de ir posicionando poco a poco nuevos destinos como los de Estados Unidos y Ecuador, aunque este último está muy maltratado por cuenta del cierre de la vía Panamericana”.

Anunció que “Colombia ha logrado retomar el mercado de Venezuela y, al mismo tiempo, fortalecido el comercio formal y disminuido el comercio de productos lácteos de contrabando -sin desconocer que este sigue siendo una realidad-. Aparece también Cuba, que, si bien tiene menor participación, al fin y al cabo, todo suma”.

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