En el marco de la reciente entrega de “Reconocimientos de Prácticas de Sustentabilidad en Lecherías Nestlé 2022”, David Mendoza, director de la División Técnica de Nestlé Chile, destacó la importancia de  reconocer el compromiso y la visión de los proveedores de leche fresca por el trabajo que se ha desarrollado en conjunto.

“Esto permite transitar hacia un sistema agroalimentario regenerativo, aportando de manera concreta a la sostenibilidad futura del sector lechero del país y el cuidado del planeta”, señaló.

El ejecutivo recordó que en 2021 Nestlé anunció un plan de inversión global para acelerar la transición hacia un sistema alimentario regenerativo.

“Actualmente, más de 200 productores de leche del sur de Chile avanzan en la transición hacia una agricultura regenerativa y otros predios que lo hacen para convertirse en Granjas Net Zero o cero emisiones netas”.

Todos estos esfuerzos están dando fruto. En total, estas prácticas se han implementado en más de 26 mil hectáreas, donde se producen cerca de 120 millones de litros de leche, y cuyos efectos se tradujeron en la reducción de más de 29 mil toneladas de CO2e en 2022.

Mendoza destacó igualmente el compromiso y trabajo del Fundo Cuel, la tercera Granja Net Zero, liderada por el productor de Los Angeles, Enrique Tapia que está avanzando para alcanzar la carbono neutralidad y los desafíos que han asumido los productores lecheros del país.

“Esta iniciativa está completamente alineada con el propósito de nuestra compañía, que es mejorar la calidad de vida y contribuir a un futuro más sustentable para esta generación y las que vengan”.

El ejecutivo señaló que el impulsar una agricultura y sistemas alimentarios regenerativos es base para contribuir a esto y para garantizar que nuestras generaciones futuras puedan alimentarse de manera sustentable y sostenible.

“Esta iniciativa de reconocer a los productores que ya se están embarcando en este camino es super trascendental porque permite no solo alentarlos y mostrar a los demás productores todos estos avances que son tangibles, y que permiten no solo contribuir al medio ambiente, sino que hacer que las fincas lecheras se vuelvan más sostenibles”.